miércoles, 19 de octubre de 2011

Cómo curar las hemorroides en forma natural?

En esta entrada veremos algunos consejos cómo curar las hemorroides en forma natural. Hay algunas hierbas que ayudan en esta patología.


     Las hemorroides, problema cada vez más extendido, está causado por el estancamiento y coagulación de la fibrina de la sangre en los minúsculos capilares que riegan el ano y parte inferior del recto.

     Esto se debe, en mayor medida, a la presencia de desechos tóxicos pegajosos en la corriente sanguínea, provocados por un excesivo consumo de féculas refinadas, especialmente pan blanco y otros productos a base de harina (facturas, masas de repostería, bollería, tortas, etc.), los chocolates, caramelos y gominolas.

     Además de reajustar la dieta, la práctica cotidiana de los ejercicios del esfínter anal (contraer y relajar, varias veces) y la defecación en posición acuclillada contribuyen a corregir y curar este trastorno.

     Veamos estas dos hierbas que nos ayudarán sino a eliminar, por lo menos aliviar las molestias que producen las hemorroides...

Arándano. (Vaccinium Myrtillus). El arándano se utiliza sobre todo para afecciones de los ojos y para fortalecer los vasos sanguíneos. Mejora la visión nocturna. Previene y  trata la degeneración macular, retinopatía diabética, y cataratas. Por su contenido en antocianinas, fortalece las paredes de los vasos sanguíneos, reduce la inflamación, y estabiliza todos los tejidos que contienen colágeno, como cartílagos, tendones, los ligamentos. La semilla de la uva contiene sustancias similares, no obstante las antocianinas del arándano tienen numerosos efectos beneficiosos para los ojos. Debido a su capacidad para fortalecer los vasos sanguíneos, el arándano puede ser útil para las venas varicosas, hemorroides, y en casos de aparición muy fácil de hematomas.

Campana. (Datura arbórea). Se dice que la campana es tan beneficiosa para las hemorroides, irritadas y dolorosas, como para alejar las malas influencias de una persona o de una casa. Son muchas sus aplicaciones en la magia.


     Encuentra más información en este sitio.




miércoles, 5 de octubre de 2011

Causas de las hemorroides (almorranas)

Muchos son los factores que pueden confluir para causar hemorroides (o almorranas). Veamos primero cuáles son los síntomas de las hemorroides -para asegurarnos de que estamos hablando de lo mismo-, cuáles son sus causas, quiénes las sufren, y las posibilidades que disponemos para su tratamiento y eliminación.

¿Cuáles son los síntomas de las hemorroides?
Los síntomas más comunes de las hemorroides son: ardor, picazón persistente, hinchazón, en el ano. Aparición de un bulto o tejido prominente, posible sangrado junto a las heces, coágulos de sangre (trombosis de las hemorroides), dolor al evacuar o al pretender hacerlo, infección.

¿Qué las provoca? ¿Cuáles son sus causas?
Entre los factores más comunes se encuentran: la edad; el estreñimiento crónico; la diarrea; el embarazo; determinadas tareas laborales: las posiciones de pie o sentado durante mucho tiempo; el sobrepeso.

¿Quiénes padecen de hemorroides o almorranas?
Las hemorroides son muy comunes en los hombres y mujeres. Las estadísticas informan que aproximadamente la mitad de la población tiene hemorroides a los 50 años. Pueden padecer esta patología:

  • Las personas bajas y gruesas;
  • las que levantan bultos muy pesados en forma asidua, provocando esfuerzos de presión en las venas rectales, con la aparición de bultos venosos o "trombos".
  • las hemorroides también tienen mucho de hereditario; los descendientes de personas que han tenido hemorroides tienen muchas probabilidades que las tengan también.
  • las mujeres embarazadas suelen tener hemorroides provocadas por el esfuerzo de cargar un bebé (sobretodo en los últimos meses) y de dar a luz.

¿Existe tratamiento para las hemorroides? ¿Cómo se curan?
Existen varios métodos de tratamiento para las hemorroides y curarlas. Adquiere aquí importancia el tiempo transcurrido desde el surgimiento de las molestias o dolores, y de la patología que las hemorroides exhiban en el momento del diagnóstico médico. Cuanto antes consultes por los síntomas que sufres, tanto más fácil y sencillo será el tratamiento y su cura.
La mayoría de las hemorroides no necesitan cirugía, se pueden tratar haciendo ciertos cambios en el estilo de vida y la alimentación.
Las hemorroides menores pueden necesitar una cirugía que se realiza en el mismo consultorio del médico o coloproctólogo, con una mínima o ninguna anestesia.

ATENCIÓN:
Debes tener en cuenta que los síntomas de la enfermedad hemorroidal y los del cáncer del recto son parecidos. El sangrado que a menudo es frecuente cuando hay hemorroides internas, también puede ser causa de una tumoración en los segmentos interiores del colon. El 50% de los pacientes que han sido diagnosticados de cáncer de colon, en su ficha técnica puede comprobarse que han sido tratados como si hubieran tenido una enfermedad hemorroidal. En estos casos es imprescindible que consultes con tu médico, colo proctólogo, o urólogo, para recibir orientación ante esta dolencia.

Abundaremos sobre la cura de hemorroides en próximas entradas.

Puedes hallar más información sobre este tema en esta página 







Otros tratamientos para las hemorroides

¿Existen otros tratamientos para las hemorroides además de la cirugía?

Como hemos informado en otra entrada de este blog, el tratamiento de hemorroides depende de cada caso en particular, de la edad de la persona afectada, de su sexo, y/o padecimiento de otras enfermedades.

     Además de la higiene local, el empleo de cremas, una dieta rica en fibras y blanda y mucho líquido, usualmente se prescribe medicación venotónica (1) y antiinflamatoria no esteroidea (2).

     Las hemorroides internas pueden esclerosarse, aplicarse bandas elásticas o realizarse coagulación con rayos infrarrojos. Si crecen o producen sangrado es probable que demanden una cirugía.

     Mientras tanto, las hemorroides "mixtas" generalmente necesitan de cirugía, más cuando existen lesiones que "cuelgan" del ano y provocan molestias. No sólo se debe hacer la cirugía para solucionar esta patología, sino por una cuestión de higiene anal y para evitar otras enfermedades.


(1) Venotónica (acción): su propósito es ser activador de la circulación de retorno de la sangre.

(2) Esteroidea (hormona): Se producen en testículo, glándula adrenal, ovarios y placenta. Ejemplos: Ovarios = estrógenos y progestagenos; testículo = testosterona; adrenales = aldosterona, cortisol y DHEA (3); placenta = progesterona, estradiol y estriol. Las hormonas esteroideas son una familia de sustancias generadas básicamente en el sistema nervioso central, la corteza suprarrenal, el hígado, e incluso la piel de diversas especies animales, entre ellas la humana.

(3) DHEA: Se trata de una “hormona madre” producida por las glándulas adrenales (suprarrenales) que están ubicadas en la parte superior de los riñones. En los hombres, el DHEA es también secretado por los testículos.


Para ampliar esta información, visita este sitio.




Hemorroides o Almorranas ¿Existe cura?

Antes de referirnos a las distintas alternativas que existen en la actualidad para curar las hemorroides, debemos conocer previamente qué es la enfermedad hemorroidal, qué son las hemorroides o almorranas, cuántas clases existen, para luego indagar sobre sus causas y elegir el tratamiento más adecuado.

Comencemos conociendo qué es la "enfermedad hemorroidal".
Se denomina así a la sensación de cuerpo extraño o tumefacción (1) en el ano, o al dolor anal. Concurren varios factores que se asocian para estas manifestaciones: obstrucción al retorno venoso en los plexos (2) hemorroidales por aumento de la presión intra-abdominal (cuando uno hace demasiada fuerza para ir de cuerpo, para evacuar sus intestinos, al defecar), el estreñimiento crónico, y el embarazo.

¿Qué son las hemorroides?
Existen varias definiciones:
  • Formación de várices que son como un cúmulo de masas dilatadas de venas anorrectales en el canal anal.
  • Vasos sanguíneos dilatados y protuberantes dentro y en torno al ano, en la parte baja del recto".
Estas venas que a menudo se "hinchan" se las conoce como hemorroide, y son las que nos provocan picazón, ardor, dolor intenso, y/o sangrado en los más comunes de los casos. Las complicaciones que habitualmente presentan los pacientes con síntomas hemorroidales: dolor, sangrado, etc., están directamente relacionadas con el tiempo de evolución de la patología. Es por ello que se recomienda consultar al médico lo antes posible, pues cuanto más temprano se realice el diagnóstico más fácil y sencillo será el tratamiento.

¿Cuántas clases de hemorroides existen?
Normalmente se las clasifican según su ubicación en: hemorroides externas y hemorroides internas (con cuatro grados distintos), aunque también las hay mixtas.

¿Qué son las hemorroides externas?
Son aquellas que aparecen cerca del borde del conducto anal y se hallan cubiertas de una piel muy fina. Fácilmente se la identifica al tacto con el dedo, como un bulto duro y sensible. En estos casos es probable que se observe sangre en el papel higiénico o dentro del inodoro después de defecar. Si se desarrolla un coágulo de sangre en alguna de ellas, provocará una dolorosa hinchazón denominada "trombo", la que se puede extirpar fácilmente mediante la aplicación de anestesia local.

¿Qué son las hemorroides internas?
Las hemorroides internas comprenden las venas dentro del recto. Usualmente no duelen, pero pueden sangrar sin provocar dolor. Las hemorroides internas se dilatan dentro del ano, debajo de la capa interna del recto, llamado mucosa. La hemorroide interna puede invaginarse dentro del recto por su propia cuenta, o empujándola cuidadosamente con el dedo de vuelta hacia adentro. Esto puede suceder en forma total o parcial, de manera indolora y sin hemorragia, durante la evacuación. A este fenómeno se lo conoce como "procidencia" (3). Las hemorroides prolapsadas pueden estirarse hacia abajo (prolapso, hundirse o sobresalir) fuera del ano.


(1) hinchazón, inflamación, abultamiento, bulto, edema, flemón, tumor.
(2) red o entrecruzamiento de vasos y nervios.
(3) prolapso, caída, descenso de una parte o de un órgano, especialmente del útero).


Hablaremos mucho más de este tema en próximas entradas.

También puedes encontrar más información en este sitio.